Artículo revisado por Dra. Mónica G. Cachero. Núm. Colegiada: 33000990
El tratamiento con carillas dentales es habitual en nuestra clínica dental de Avilés, que puede mejorar la apariencia de los dientes al ocultar sus imperfecciones y brindarles un aspecto más estético y un color mejorado.
El uso de carillas dentales para corregir defectos estéticos en los dientes puede ser un tratamiento duradero con los cuidados adecuados. Te contamos los más importantes:
Higiene bucodental
El material utilizado para las carillas dentales suele ser bastante resistente, pero si no se mantiene una buena higiene bucodental, estas piezas no se conservarán en buen estado. Se recomienda cepillarse los dientes al menos tres veces al día y utilizar hilo dental regularmente para prolongar la duración de las carillas.
Material utilizado
Otro factor que influye en la duración de las carillas dentales es el material utilizado en su fabricación. Las carillas de composite son más económicas, pero también son más propensas a fracturarse con el paso del tiempo. A pesar de esto, si se mantiene una buena higiene bucal, pueden durar en buenas condiciones de 5 a 7 años. Por otro lado, las carillas de disilicato de litio o porcelana son más resistentes, tienen un coste más elevado y su duración puede aproximarse a los 10 años.
Revisiones periódicas
Es importante realizar revisiones periódicas con un dentista para mantener las carillas dentales en buen estado. Las carillas de composite requieren revisiones cada 6 a 12 meses, ya que tienden a deteriorarse con mayor facilidad. Mientras tanto, las carillas de disilicato de litio necesitan visitas regulares, generalmente una o dos veces al año.
¿Qué tipo de tratamiento de carillas elegir?
Al optar por carillas dentales, se pueden elegir dos tipos principales: las de composite o las de porcelana. Las carillas de composite son recomendadas para corregir dientes irregulares, con tamaños alterados o espacios entre ellos. Estas carillas se pueden fabricar en una sola cita y no requieren anestesia local. Además, permiten la modificación de las carillas para lograr un resultado estético más favorable.
Por otro lado, las carillas de porcelana son láminas finas hechas a medida que se adhieren a los dientes para conseguir la forma y el tamaño correctos. Requieren varias visitas al dentista para su colocación. Este tipo de tratamiento es más costoso, pero ofrece resultados duraderos y un tono dental más natural.
Es importante consultar a un dentista para que indique la opción más adecuada según los problemas dentales específicos. También se debe acudir al dentista si se observan cambios en la coloración de los dientes, cambios en la posición de los mismos o anomalías en el tamaño, volumen o forma.
¿Cómo cuidar las carillas dentales?
Las carillas dentales requieren una inversión económica, por lo que es importante cuidarlas adecuadamente para prolongar su vida útil. Además de mantener una buena higiene bucodental, existen varios consejos útiles:
- Evitar apretar los dientes, ya que esto puede provocar astillamientos y fracturas en las carillas.
- Evitar alimentos duros o pegajosos que puedan dañar o despegar las carillas, como cáscaras o huesos.
- Evitar el consumo de tabaco y azúcar, que pueden provocar decoloración y afectar la estética dental.
- Evitar el uso de pastas y enjuagues con colorantes, ya que pueden afectar el color y el brillo de las carillas con el tiempo.
- Evitar morder objetos duros o las uñas, ya que esto puede dañar tanto las carillas como los dientes naturales.
- Realizar revisiones y mantenimientos regulares con el dentista, esenciales para el cuidado y la prolongación de la vida útil de las carillas dentales.
En conclusión, las carillas dentales pueden tener una duración prolongada si se les brinda el cuidado adecuado. Mantener una buena higiene bucodental, elegir el material apropiado y realizar revisiones periódicas con un dentista son medidas clave para garantizar la durabilidad y la estética de las carillas dentales.
