Artículo revisado por Dra. Mónica G. Cachero. Núm. Colegiada: 33000990
Uno de los problemas más habituales en los niños es el paladar ojival, también conocido como paladar estrecho. Se trata de una anomalía bucal que puede producir maloclusiones durante la edad adulta.
Por esa razón, es necesario corregir este problema lo antes posible, durante la etapa de crecimiento.
¿Qué es el paladar ojival?
El paladar estrecho es un problema habitual en los bebés, especialmente en los que usan por mucho tiempo el chupete o tienen el hábito de succionarse el dedo. Incluso en los niños que respiran de manera frecuente por la boca al tener complicaciones en la respiración nasal.
El paladar se encuentra en la parte de superior de la boca y tiene una forma curva. Se encuentra dividido en dos partes, el paladar blando que se encuentra en la parte posterior y el paladar duro que se sitúa en la parte anterior de la boca.
El paladar duro lo conforman la estructura ósea del paladar y el maxilar, mientras que el blando está formado por tejido muscular.
El problema con el paladar estrecho ocurre cuando esa estructura ósea no se desarrolla de la forma correcta en la etapa de crecimiento, estrechándose más de lo habitual.
¿Cómo detectar el paladar estrecho?
No es sencillo detectar el paladar estrecho en los niños. Lo más recomendado es visitar la consulta de odontopediatría, donde se realizarán las pruebas necesarias para identificar esta particularidad.
La primera visita se recomienda en una edad aproximada de seis años, momento en que se puede iniciar un tratamiento para solucionar el paladar estrecho.
¿Cómo afecta a los menores?
Uno de los principales problemas del paladar ojival es que afecta la aparición de los dientes temporales y los definitivos en los niños.
Cuando presentan esta anomalía, lo más probable es que sufran de problemas de oclusión y alineamiento en sus dientes. Además, el paladar estrecho puede causar mordida cruzada, dientes torcidos o apiñados. Todos ellos problemas que afectarán la funcionalidad y estética dental de los niños durante su crecimiento.
¿Cómo tratar el paladar ojival?
El problema del paladar estrecho se puede tratar, especialmente entre los 6 y los 12 años de edad. Para guiar el correcto crecimiento de las estructuras óseas se puede usar un expansor de paladar o disyuntor palatino.
El disyuntor dental se ancla en los molares posteriores. El aparato cuenta con un sistema en el centro que ejerce fuerza hacia el exterior del maxilar superior.
Gracias a esto, el aparato para ensanchar el paladar es capaz de reducir el estrechamiento del hueso del paladar.
El tratamiento con expansor tiene una duración diferente según cada caso, estando la media de tratamientos en una duración comprendida entre siete meses y un año. En todo caso, el tratamiento dependerá del grado de estrechamiento del paladar y de cómo respondan los niños a la ortodoncia.
Cuando se logre la expansión planificada con el disyuntor dental, el desarrollo del paladar del niño se dará de forma óptima durante el resto de su etapa de crecimiento.
¿Por qué es necesaria la ortodoncia para tratar el paladar estrecho?
El expansor de paladar se combina con frecuencia con un tratamiento de ortodoncia para mejorar la funcionalidad y la estética bucodental.
Como los dientes no contaron con espacio suficiente en la arcada superior para desarrollarse con normalidad, no estarán alineados correctamente.
Los aparatos ortodóncicos son capaces de solucionar diversos tipos de maloclusión, tanto a nivel dentario como esquelético, por lo que es indispensable acudir al especialista para tratar este problema.
